Llevo unos días sin escribir nada y es que he estado un poco ocupada. De un tiempo a esta parte llevo notando que algún pájaro se posa en mi terraza y si dejo algo fuera pues se lo come. No le había dado más importancia y de hecho me parecía hasta gracioso porque tenía dos bolsas de bombones y un día nos dimos cuenta que había restos de chocolate esparcidos por el suelo de la terraza y que en las bolsas había lo que parecían ser picotazos. Nos pareció bastante cómico y desde entonces hemos evitado dejar comida a la vista.
Pero estos últimos días he notado como esa presencia iba “in-crescendo” , que si plumas, que si ramitas… hasta que el otro día salgo a poner una secadora y de la parte de arriba de uno de los armarios sale volando un pájaro. Claro yo pienso,” bueno será algo puntual”, pero por la noche lo mismo. Total que a la mañana siguiente investigamos y efectivamente había un nido. Claro yo utilizo mi terraza a modo de “trastero temporal” entonces les venía de perlas el huequecito que específicamente quedaba entre dos jamoneros que tenía allí olvidados de la mano de dios. Total que quitamos el nido y ya doy por zanjado el tema, pero por la noche me vuelvo a fijar y ya no había una paloma (aunque luego he sabido que eran tórtolas y no me preguntéis ni en que ni como se diferencian porque no lo sé) sino 2, una pareja de tórtolas me dijo un amigo un poco entendido en el tema. Los espantamos por la noche y esta mañana hemos comenzado la “operación palomo” porque claro hemos pensado que si venían 2 podrían venir ni me imagino cuantas, empezamos a quitar cajas y lo jamoneros cuando zas! Se cae un huevo. Que mala pata, total que mientras lo estamos limpiando vamos entrando y saliendo de la terraza, y en una de estas nos encontramos a uno de los pájaros que anidaban en la terraza apoyado en la barandilla, lo echamos y observamos cómo se aleja volando hasta el tejado de la casa de enfrente donde le esperaba la tórtola blanca que rondaba nuestra terraza. No nos han quitado ojo de encima durante todo el rato que hemos estado limpiando y ordenando la terraza, y nosotros con un cargo de conciencia… claro se nos ha caído el huevo al suelo y por consiguiente este se ha roto.
La verdad es que nos ha dado pena sobre todo cuando ya hemos dado por terminada la limpieza y nos hemos ido de la terraza directos a mirar por una ventana para ver que hacían los pajaritos, los cuales como os podréis imaginar no han tardado ni un minuto en aterrizar en la terraza y en buscar supongo que el huevo, porque el nido ya lo habíamos quitado ayer.
Bueno quería compartir con vosotros esta pequeña “aventurilla”. Espero que os haya entretenido,
Un saludo a todos
Doris Tiburrias
Pero estos últimos días he notado como esa presencia iba “in-crescendo” , que si plumas, que si ramitas… hasta que el otro día salgo a poner una secadora y de la parte de arriba de uno de los armarios sale volando un pájaro. Claro yo pienso,” bueno será algo puntual”, pero por la noche lo mismo. Total que a la mañana siguiente investigamos y efectivamente había un nido. Claro yo utilizo mi terraza a modo de “trastero temporal” entonces les venía de perlas el huequecito que específicamente quedaba entre dos jamoneros que tenía allí olvidados de la mano de dios. Total que quitamos el nido y ya doy por zanjado el tema, pero por la noche me vuelvo a fijar y ya no había una paloma (aunque luego he sabido que eran tórtolas y no me preguntéis ni en que ni como se diferencian porque no lo sé) sino 2, una pareja de tórtolas me dijo un amigo un poco entendido en el tema. Los espantamos por la noche y esta mañana hemos comenzado la “operación palomo” porque claro hemos pensado que si venían 2 podrían venir ni me imagino cuantas, empezamos a quitar cajas y lo jamoneros cuando zas! Se cae un huevo. Que mala pata, total que mientras lo estamos limpiando vamos entrando y saliendo de la terraza, y en una de estas nos encontramos a uno de los pájaros que anidaban en la terraza apoyado en la barandilla, lo echamos y observamos cómo se aleja volando hasta el tejado de la casa de enfrente donde le esperaba la tórtola blanca que rondaba nuestra terraza. No nos han quitado ojo de encima durante todo el rato que hemos estado limpiando y ordenando la terraza, y nosotros con un cargo de conciencia… claro se nos ha caído el huevo al suelo y por consiguiente este se ha roto.
La verdad es que nos ha dado pena sobre todo cuando ya hemos dado por terminada la limpieza y nos hemos ido de la terraza directos a mirar por una ventana para ver que hacían los pajaritos, los cuales como os podréis imaginar no han tardado ni un minuto en aterrizar en la terraza y en buscar supongo que el huevo, porque el nido ya lo habíamos quitado ayer.
Bueno quería compartir con vosotros esta pequeña “aventurilla”. Espero que os haya entretenido,
Un saludo a todos
Doris Tiburrias
Pera dice:
ResponderEliminarHola Doris.He estado fuera y hacía días que no te leía.A propósito de la operación palomo.
Te he entendido perfectamente. A mí me dan miedo los pájaros y me pasó una cosa parecida pero fué con gorriones.
Habían hecho el nido en un macetero muy grande que tenía en la terraza con geraneos colgantes.Y también empecé a mosquearme con tanto pajarito en el balcón.
Tengo una cena al viernes para 7 personas. Me podrías dar alguna idea que sea fácil y se pueda preparar con antelación? O por lo menos una parte.
Pera dice gracias y adios