Este verano he recibido varios regalitos culinarios y quiero agradecer desde aquí a quienes han tenido este detalle conmigo:
El primero: mi hermano Jacobo, que me regaló esta botella de aceite de oliva del Poble Nou del Delta.
El segundo es mi cuñado Paco, que vale un valer y que el día que se acerco a la FIRAGOST de Valls, también se acordó de mí y me compró esta garrafa de aceite de arbequina, que además es mi favorito.
Los terceros son mis padres, que entre otras cosas me compraron en Barbastro esta botella de aceite de oliva del Somontano.
Como ya estaba servida de aceites mi hermano B. me trajo de Alemania este “kit” que consiste en unos topings para decorar galletas, trufas… Unos moldes de silicona para hacer cupcakes y unos sobres para aliñar ensaladas que sabe que me encantan y cada vez que viajan a Alemania me traen un surtido.
Estoy encantada, muchas gracias a todos por vuestros regalitos.
Un beso
Doris Tiburrias
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